A MÉXICO LE URGE UN RUMBO DE PROGRESO

Por: Ramón Rosales Córdova

México, nuestro país, necesita; le urge un rumbo hacia el progreso, un equilibrio político, social, cultural y económico donde reine y prevalezca el sentido humano de justicia y equidad, sobre todo para los olvidados… desvalidos.

Esa clase trabajadora que da su vida produciendo riquezas día tras día y que a cambio recibe migajas, miserias de un régimen que si bien es eficiente en cuanto a producción de riquezas, es insensible, inhumano y carente de rumbo, se necesita un ente con conocimiento de causa, con la suficiente claridad y conocimientos sostenidos en la técnica en la ciencia y no en corazonadas y buenos deseos, interesado en hacer justicia, interesado en repartir la riqueza de manera imparcial y objetiva sin caer en excesos, buscando que todos los humanos vivan con dignidad, bien alimentados nutridos con alimentos que superen a los frijolitos y a las tortillas de maíz, que formen a un mexicano fuerte seguro e inteligente; para esto llegó un gobierno diciendo que, “primero los pobres” un mandato llamado la cuarta transformación, dicho, sea de paso que tal transformación no llega, y aclarando, al menos no para la clase trabajadora no hay nada, nuestro gobierno federal encabezado por el Lic. Andrés Manuel López Obrador no ha propuesto con la claridad necesaria y urgente un plan nacional para desarrollar fuentes de empleo a nivel nacional, y que estos empleos sean bien remunerados para que alcance a cubrir las necesidades básicas y recreativas de una de una familia promedio mexicana, y en consecuencia, una recaudación de impuestos de forma progresiva que pague más el que más genera riquezas, y que la recaudación de impuestos muy necesaria por cierto, sea canalizada a desarrollar las distintas regiones de México generando las condiciones óptimas en un interés claro para el desarrollo socioeconómico en un contexto nacional e internacional. Nada de esto se ve en este gobierno de la Cuarta Transformación, todo lo contrario, guiado por un sentido idealista y creyéndose perseguido por todo mundo, aludiendo que “se quiere regresar al pasado” donde impero el desorden según ellos, llenos de corrupción y potentados que hacían y deshacían para su bien propio, y así, sin más argumentos sólidos que convenzan para seguir su “proyecto de nación”.

Es por eso que tenemos la obligación a opinar y hacer un llamado a formar un frente nacional que sume a todas las fuerzas que quieran el verdadero progreso de nuestra patria, donde todos los actores sean incluidos y para esto, se necesita operar de manera democrática como lo dicta nuestra carta magna, y así por la vía democrática llegar al poder político en los distintos órdenes de gobierno y guiar hacia un rumbo distinto, ahora sí favoreciendo a los desfavorecidos, a la clase trabajadora olvidada por muchos y por el actual gobierno de la 4aT.

Esto es posible y nos invita a unificar criterios, y punto de partida para hacer contrapeso puede ser el congreso de la unión, sí desde la cámara de diputados hacerle claridad al poder ejecutivo que debe hacer y por donde debe de caminar, una fuerza que no sea su fiel y ciega seguidora, sino una fuerza con claridad, con conocimientos basados en la ciencia, sumergida en el contexto social nacional y mundial con el firme propósito de que México desarrolle sus capacidades productivas y la riqueza transformada en un sinnúmero de mercancías que se lleguen a producir beneficie a todos los mexicanos y no a unos cuantos como ha venido sucediendo hasta ahora, sabemos que sencillo no es, de aquí se desprende la necesidad de asesorase o dejarse asesorar sin ver que toda opinión contraria busaca solo destruir, son necesarios los especialistas en las distintas áreas del saber humano, y dejar de hacerle al “todólogo” y menos si no se está preparado técnica y científicamente, todo esto claro acompañado de un sentido humanista visionario, sin corazonadas de por medio ni amuletos mágicos.

¡Mexicanas y mexicanos! salgamos a luchar por un México prospero donde todos tengamos lo suficiente para vivir, sin zozobras de ningún índole, con viviendas dignas, sanos, bien alimentados, bien vestidos y calzados, con espacios recreativos y deportivos que no promuevan la degeneración humana sino todo lo contrario. Para esto se necesita de un proyecto de nación que contemple a todos los actores, que genere las condiciones necesarias para un desarrollo económico y social incluyente donde todos sumen; según datos de los organismos que estudian la condición socioeconómica mundial México, es un país que ocupa el lugar 14 en cuanto a riqueza de un total de 194 países reconocidos por la ONU y sin embargo nos inunda la pobreza de 127.09 millones de mexicanos un 76% le asiste la pobreza, no podemos seguir igual. El Movimiento Antorchista Nacional invita a los Antorchista claro está, a toda la población mexicana, a todas las fuerzas progresistas a sumar voluntades y esfuerzos y dar el rumbo de progreso y bienestar que ocupa nuestra patria y volvernos verdaderamente independientes y autosuficientes en esa concatenación universal de la cual no podemos escapar con simples decretos.